Tras desvelar una colección cápsula para el verano con un look de los setenta llamado “Ciao Paco” a principios de junio,Julien Dossena presenta en esta ocasión su colección primavera-verano 2022 para Paco Rabanne, siempre en este mismo espíritu veraniego. Las siluetas desfilaron por la pista de helicópteros más colorida del mundo en lo alto del Centro de Congresos de Mónaco, que mantiene su fama gracias a la magnífica obra de mosaico que lo compone. Originalmente encargada por Grace Kelly, esta instalación pública a gran escala llamada “Hexa Grace” fue creada en 1979 por el artista húngaro Victor Vasarely, considerado el padre del arte óptico. La obra, que tiene una vista panorámica del Mediterráneo, incluye más de 24.000 azulejos de colores brillantes, y representa bien la obra del artista visual, entre sus muchas pinturas abstractas.
Paco Rabanne decidió entonces rendir homenaje a quien compartió su misma vanguardia artística hace 60 años. Al igual que los tableaux vivants reales, las modelos llevan piezas ultra-coloridas impresas con los famosos patrones geométricos del artista, en vestidos, chalecos o blusas. Decididamente inspirada en los años 60 y 70, la colección combina lo chic de la jet-set con looks bohemios casuales. También hay piezas brillantes específicas de la casa, como tops fluidos y faldas de malla metálica reinventadas con flecos en cascada o un gradiente de lentejuelas doradas. Por último, el desfile incluye dos looks compuestos por un juego bordado de lentejuelas destacando el motivo de uno de los cuadros insignia de Victor Vasarely titulado “El beso”. Más figurativa, esta obra presenta rostros y manos declinadas en plata y oro que se encuentran, como si durante un abrazo.
